Te cedo mis palabras
que cantan junto al viento…
y todas mis miradas
preñadas de pasión
Te cedo mis sentidos
y aquellos juramentos…
que fui tallando a pulso
de un loco corazón
También esos jardines
botando de mis manos…
donde nos empapamos
amor de plenitud
Te cedo mis cabellos
mis ojos y mis labios…
y amor hasta los sueños
que había en mi juventud
Las noches más eternas
contando las estrellas…
te cedo los rincones
dorados de mi piel
Y hasta mi pensamiento
que juega con el tiempo…
que allí entre madrigales
parece amanecer!
Eileen
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